La ciudad metropolitana de Monterrey, está pasando en este momento por una de sus peores crisis de agua en los últimos 20 años. Un inmenso desabasto que ha secado dos de las cuatro presas con las que cuenta el estado de Nuevo León para  sostener una urbe con más de 5 millones de habitantes  Y en medro de este alarmante escenario, es pertinente exponer ciertas cuestiones que aclaren el panorama general bajo una perspectiva, evidentemente de clase.

Si bien, los indicios de una sequía inminente ya se habían presentado desde el 2014, no es la única razón y mucho menos la determinante de este alarmante desabasto. El hecho de que las lluvias hayan decrecido en la entidad no justifica las inmensas concesiones sobre el agua que se le otorgan a transnacionales y empresas de producción masiva aquí en la región.  Termium, Femnsa y Heineken son las tres principales empresas que más agua utilizan del sector industrial, el cual, ya acapara el 54% de los recursos acuíferos que posee la ciudad. (Robeldo, 2022)

El gobierno del estado ha optado por recortar y suspender el flujo de agua a barrios, colonias y municipios para después hacerlo a nivel general en toda la zona metropolitana, con el fin de hacer frente a esta crisis que de sus efectos solamente deben preocuparse los asalariados.  Medidas inútiles que solo agravan más la situación al dejar sin suministro de agua a la población regiomontana de una manera desigual, existiendo casos en los que numerosas colonias que componen principalmente a los municipios de Escobedo, San Nicolás y García, no cuentan con agua desde hace semanas, viéndose obligados a comprar este recurso de uso diario ante la ineptitud de la gestión estatal, que premia los intereses económicos de la patronal a las necesidades vitales de la clase trabajadora.

Estas personas; de origen obrero en su mayoría, habitan barrios populares que se encuentran marginados y alejados de la zona céntrica de la ciudad, empujados cada vez más a la periferia de la metrópoli, como lo es el caso de Valle de Lincoln, en el municipio de García. Tan solo hace una semana, residentes de dicho fraccionamiento optaron por bloquear la Av. Lincoln tras haber padecido tres semanas sin servicio. Este es solo un ejemplo de los diversos bloqueos que se han suscitado después de que la escasez de agua haya ido a peor sumándole, a su vez, la inepta gestión de la crisis que solo ha recrudecido más la situación.  (Villaseñor, 2022)

¿Qué acciones ha cometido la cúpula política de Nuevo León en contra del empresariado  que controla, maneja y consume 44 millones 490 mil 222 metros cúbicos de agua al año, en comparación al consumo cotidiano poblacional que apenas asciende el millón de metros cúbicos? Ninguna, porque sería demasiado hipócrita morder la mano que les da de comer. Esa es la esencia de la política y el estado burgués: asegurar, garantizar y defender los intereses económicos de la clase dominante. Da igual la dicotomía, el color del partido o el individuo, lo que realmente trasciende es a quien representan, y en este caso, ya ha quedado demasiado claro,  puesto que las crisis; de cualquier tipo, siempre las pagan los mismos: Los trabajadores.

Referencias:

Robeldo, R. R. (22–06-07). Acaparan 15 empresas el agua en NL; crecen protestas por la escasez. LaJornada. Recuperado 22–06-24, de https://www.jornada.com.mx/notas/2022/06/07/estados/acaparan-15-empresas-el-agua-en-nl-crecen-protestas-por-la-escasez/

Villaseñor, A. V. (22–06-14). Ciudadanos bloquean avenida Lincoln por falta de agua. POSTA. Recuperado 22–06-24, de https://www.posta.com.mx/nuevo-leon/ciudadanos-bloquean-avenida-lincoln-por-falta-de-agua/588754#:~:text=Ciudadanos%20que%20habitan%20en%20la%20colonia%20Valle%20de,les%20ha%20llegado%20agua%20desde%20hace%20tres%20semanas.