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Viudas o la lucha por los desaparecidos

 

Por: José Eduardo Rodríguez

Publicada en 1981 por Siglo XXI Editores, la novela Viudas del escritor argentino-chileno Ariel Dorfman se nos presenta como una obra, que entre otros elementos, pretende denunciar la violencia ejercida por gobiernos militares.

Antes de abordar la temática, enfoquémonos en su método de escritura. En las primeras páginas del libro se lee un texto “A modo de dedicatoria”, donde el autor relata la razón por la cual intentó publicar su novela bajo el seudónimo de Eric Lohmann. En dicha explicación se puede leer: “Era mi decisión que esta novela no se publicara bajo mi nombre. Deseaba que los lectores la recibieran como si hubiera sido escrita por un danés, Eric Lohmann, resistente anti-nazi muerto hace cuarenta años”. El autor agrega: “En efecto, libros que yo firmo no podían —y muchos aún no pueden— circular en los países del Cono Sur de América Latina” (1981, p. 7). [1] De esa manera, Ariel Dorfman ofreció el proyecto a una editorial que contaba con el permiso de distribuir sus libros en aquellos países. Al finalizar la escritura, el autor presentó su obra a la editorial y finalmente, optaron por no editarla. ¿Por qué razón la editorial se negó a editarla e imprimirla? La razón es simple: las dictaduras militares, y en especial la chilena, eran plenamente aludidas.

Posterior al texto previamente comentado, el libro contiene algunas “Palabras preliminares del hijo del autor”. Dichas palabras del hijo del falso autor, Eric Lohmann, fungen como método de validación o como generador de verosimilitud. En el texto se relata lo siguiente: “Yo nunca conocí a mi padre. Vinieron a buscarlo los hombres de la Gestapo un mes antes de mi nacimiento, en abril de 1942. […] Como el lector verá, la acción transcurre en un país que se asemeja a Grecia, aunque nunca se lo nombra como tal”. Asimismo, se enfatiza que: “Si se trata de veras de Grecia, parece más bien una mezclada combinación insólita de dos épocas en su historia, la dictadura de Metaxas y la posterior invasión extranjera” (1981, p. 15). De esta manera se demuestra, que en épocas de fascismo, y por lo tanto, de censura, el artista encuentra la manera de producir arte y que éste pase desapercibido por los censores. Ante la imposibilidad de aludir directamente a Chile y a la dictadura militar, el autor buscó un método distintito de escritura para referirse a tal momento de la historia chilena.

En cuanto a la temática, Ariel Dofrman desarrolla la historia de una familia que ha perdido a gran parte de sus familiares masculinos, ya que estos se encuentran en condición de detenidos-desaparecidos. Sofía, matriarca de la familia, se encarga de enfrentarse a la burocracia militar. El autor rompe con el modelo clásico de personajes masculinos épicos para dotar de movimiento y distintas cualidades a los personajes femeninos. En esta novela, no solamente Sofía demuestra su heroísmo y perseverancia ante tan compleja situación, sino un conjunto de otras 36 mujeres que enfrentan a una dictadura militar. Las mujeres tienen un objetivo en particular: encontrar a sus familiares masculinos desaparecidos. Novela polifónica donde dicha agrupación nos recuerda a las Madres de la Plaza de Mayo que buscan a sus hijos en plena dictadura militar, a las madres de los 43 normalistas, a las asociaciones de madres de Ciudad Juárez cuyas hijas se encuentran desaparecidas y por supuesto, a las madres de tantos desaparecidos durante la dictadura de Augusto Pinochet.

Tras leer Viudas, el lector notará por qué la novela no logró ser publicada en Chile. Ya que autor recrea ciertos momentos que rodean la detención ilegal de algún familiar: la protesta, la búsqueda, la tortura y la inagotable esperanza del reencuentro con el detenido.

Por último, la prohibición de la novela de Ariel Dorfman no fue un hecho aislado, en el sitio web Colección Libros Destruidos y Prohibidos en Dictadura, encontramos una lista de libros de diversos autores que fueron quemados o destruidos según testigos. A continuación, un breve recuento de autores cuyos libros fueron prohibidos en Chile durante la dictadura militar: Poli Delano, José Donoso, Federico García Lorca, Máximo Gorki, Eduardo Galeano, Gabriel García Márquez, Julio Cortázar, Volodia Teitelboim, Pablo Neruda y por supuesto, Ariel Dorman. También fueron prohibidos textos de teóricos como Karl Marx, Friedrich Engels, Ernesto Che Guevara, Fidel Castro, Gyorgy Lukács, Rosa Luxemburgo, Mao Tse-Tung, José Carlos Mariátegui, entre otros. Es así como la lectura de Viudas es y será, un hecho de resistencia hacia aquellos censores que pretenden prohibir la lectura de textos fundamentales de carácter latinoamericano.

[1] Ariel Dorfman, Viudas, México, Siglo XXI Editores, 1981.

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