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Sobre las elecciones en Argentina

Entrevista con Tomás Oroño, Secretario General del Partido Comunista Argentino

El Machete: ¿Cuál es la situación de la clase obrera de Argentina en la actualidad luego de una gestión “progresista”?

Tomás Oroño: La situación de la clase obrera en la Argentina es paupérrima, desde que asumió el “progresismo” en 2019 fue la continuidad del programa de gobierno de Mauricio Macri, no hubo grandes cambios en la político económica, represiva, social, por lo contrario, la situación de la clase obrera fue empeorando principalmente en la economía en estos últimos 4 años, con 150% de inflación, con casi 50% de pobres, hoy en la Argentina casi el 60% de los niños son pobres, y el 14% de los argentinos viven en la indigencia, aunque la desocupación es del 6%, los trabajos actuales son en la informalidad, con extensas jornadas laborales y con sueldos de un promedio de 120 dólares, estos datos dan un panorama de la administración “progresista”.

Durante todos estos 4 años de gobierno de Alberto Fernández, Sergio Massa, y Cristina Kirchner, la represión y el ajuste a los trabajadores fue brutal, hoy en día por ejemplo en la Provincia de Buenos Aires, donde gobierna Axel Kicillof, progresista de primera hora, hay una ofensiva contra los docentes combativos que luchan y hacen huelga por el aumento de salarios, donde el gobierno les descuenta gran parte de su sueldo por luchar, yendo contra un derecho que ya fue conquistado en el siglo pasado. Por otra parte la represión a las movilizaciones durante estos 4 años, y la violencia institucional no pararon, profundizaron la política represiva del gobierno de Macri-Bullrich, se puede ver en Guernica, donde miles de familia sin techo habían recuperado tierras en desuso para poder habitarlas, el gobierno progresista desplego un operativo pocas veces visto, y desato una terrible represión que dirigió Sergio Berni –Ministro de Seguridad de Buenos Aires y persona de confianza de Cristina Kirchner-, desalojando con balas mujeres, niños, ancianos, y avanzando con topadoras para destruir las precarias casas que habían construido.

En termino de entrega de la soberanía, el gobierno progresista sigue entregando nuestros recursos naturales a los monopolios de distintos países, un caso es el del litio, ya que Argentina es uno de los países con más reservas de litio, que se la están disputando varios monopolios, Sergio Massa, el candidato del peronismo para estas elecciones, también estuvo negociando la extracción del litio con monopolios chinos y estadounidenses, como Blackrock, Vanguard, JP Morgan y HSBC que también están detrás del negocio extractivista, y en Argentina, José Luis Manzano, hombre cercano a Sergio Massa, que mediante Lithium acumula 243 000 hectáreas de salares para explotar el litio. En Argentina, el litio está distribuido entre Salta que tiene el 40%, Jujuy con el 37% y Catamarca con el 23%, y entre las tres provincias acumulan 38 proyectos de explotación del litio, el cual solo dos están en funcionamiento, la primera en eln el Salar de Olaroz (Jujuy) se encuentra Sales de Jujuy SA. Una empresa controlada en un 65 % por Alkem, 25 % por la automotriz Toyota, y Jujuy Energía y Minería (Jemse), que por norma se queda con el 8,5 % de todos los proyectos de la provincia, y el segundo proyecto en el Salar del Hombre Muerto (Catamarca) la explotación está a cargo de la norteamericana Livent. Las regalías que le quedan al Estado Argentino con estas extracciones son del 3%, dando una clara señal de la perdida de todo tipo de soberanía a manos del “progresismo”.

La situación económica, la situación represiva y la entrega de la soberanía son 3 aspectos fundamentales para entender la continuidad peronista del proyecto de país que inicio con Mauricio Macri, que se profundizo con Alberto y Cristina, y se seguirá profundizando con el próximo gobierno.

 

El Machete: Ya están definidos los dos candidatos para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales ¿qué tipo de intereses representa cada uno de los candidatos, y en qué se diferencian?

Tomás Oroño: Javier Milei y Sergio Massa, no son lo mismo, eso lo tenemos claro, se diferencian en las alianzas internacionales, en la administración del estado, y disienten en que capitalismo quieren aplicar para Argentina, aunque los comunistas sabemos muy bien que el capitalismo es un solo, hoy se disputan que tipo de administración capitalista tendrán, por ejemplo en las alianzas internacionales Sergio Massa plantea sin duda relaciones con EE.UU e  Israel, pero también mantendría la pertenencia a las uniones interestatales donde Argentina se encuentra, por ejemplo los BRICS, Mercosur, etc., por lo contrario Javier Milei plantea romper relaciones con Brasil –principal socio económico de la Argentina- y con China, y que solo tendrá relaciones con EE.UU e Israel, y como prueba de eso, la embajada de Argentina prometió que será trasladada de Tela Viv a Jerusalén. En términos del Estado, Javier Milei propone eliminar los Ministerios y los cargos públicos a la mitad de lo que hay hoy y Sergio Massa por otro lado tiene una política de “Estado presente” al menos en lo discursivo, y en términos económicos Milei propone una dolarización y eliminar el Banco Central.

Dichas las diferencias, insistimos que Javier Milei y Sergio Massa no son lo mismo, pero hacemos hincapié en que representan los mismos intereses de clase, los dos candidatos están alineados a los organismos financieros internacionales, como el FMI o el Banco Mundial, están en alianza con distintos monopolios, tanto de litio, alimenticios, etc., los dos candidatos con gran influencia de la Embajada de EE.UU, los dos tienen en agenda un ajuste peor que el actual que recaerá sobre la clase obrera, entra tantas otras coincidencias, que van dando un panorama que tanto Massa como Milei son los representantes de los intereses capitalistas, por eso los comunistas no tenemos que elegir por uno o por otro en esta disputa interburguesa.

El Machete: ¿Qué le espera a la clase obrera ante este panorama electoral?

Tomás Oroño: La clase obrera lamentablemente tendrá que elegir entre un explotador u otro, entre dos capitalistas, entre dos de sus verdugos, y lo que vendrá post elecciones será más ajuste, mas entrega y más represión, seguirán los aumentos en los elementos básicos, en el transporte, aumentara la represión de la protesta social, mas persecución a los luchadores, y más pobreza y miseria para toda la clase obrera argentina.

 

El Machete: ¿Qué alternativa le queda a la clase obrera de Argentina?

Tomás Oroño: El mismo 19 de Noviembre la única expresión electoral que le puede quedar en forma de protesta es votar en blanco o anular el voto y no elegir por ningún bando capitalista, ni por un verdugo ni por otro, pero como sabemos que las urnas no son las que definen, después de las elecciones se abrirá camino a 4 años de duras luchas en defensa de las conquistas logradas que nos vienen a arrebatar, por los salarios, por el trabajo, por la comida, contra la represión, y la alternativa que le queda a la clase obrera es organizarse en pos de su objetivo histórico, y ahí es donde los comunistas argentinos tenemos que dejar hasta lo último de nuestros alientos en la organización de la clase obrera, y elevar esos conflictos venideros, que pasen de meramente conflictos reivindicativos a grandes acciones de masas en pos del objetivo estratégico.

El Machete: ¿Qué harán el PCA?

Tomás Oroño: Desde el Partido Comunista Argentino, llamamos a la clase obrera argentina a no ponerse bajo bandera ajena, por eso llamamos a la abstención o a anular el voto, ya que no podemos elegir por quien nos va a explotar, nuestro objetivo es el poder obrero, no es una administración capitalista u otra, y es lo que no han comprendido todos los “Partidos Comunistas” que hoy integran el gobierno y llevan como candidato y jefe político a Sergio Massa.

Nos preparamos para las luchas venideras, sea el gobierno de Massa o de Milei, el Partido Comunista estará presente organizando los conflictos, luchando día a día para convertirnos en la vanguardia del proletariado argentino, y dar todas las batallas que sean necesarias para golpear al régimen actual. Por eso insistimos que para que la clase obrera tenga éxito en las luchas que vendrán estos próximos 4 años, necesitamos un Partido Comunista fuerte, y no descansaremos hasta construir ese gran Partido que la clase obrera necesita para sepultar de una vez por todas al capitalismo en Argentina, y construir una sociedad sin clases, el socialismo-comunismo.

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