Por: Héctor Ramírez Cuéllar

 

El nuevo concepto estratégico discutido y aprobado por la OTAN en su pasada reunión de Madrid replantea de una manera radical las concepciones que habían sido aceptadas en la asamblea de Lisboa y ahora se postula que el enemigo principal es la Federación Rusia y el enemigo secundario, en este nuevo orden de prioridades, es China. Por lo tanto, se considera a la región de Europa Occidental y la región de Eurasia con la más sensible y peligrosa, en la cual existen hoy en día los mayores peligros en donde está de por medio no solo la seguridad de los países europeos, sino también la libertad, la democracia, los derechos humanos, es decir un conjunto de libertades, de principios que se apreciaban sustanciales en la vida y el funcionamiento de los paises capitalistas occidentales. Pero, además, amplia en forma considerable su jurisdicción política y su natural área de influencia hasta el Oriente Medio, hasta los mares de China, aunque de momento no se precisan las tácticas que deberán seguirse para avanzar hacia esa región del mundo, con la finalidad para contener a China.

En la nueva reconfiguración política y militar de la OTAN, el papel más destacado lo representan las grandes aportaciones que se asignaron al gobierno de los Estados Unidos, que así reasume y fortalece su papel de líder fundamental y decisivo. En la actualidad, los efectivos militares yanquis son 100 mil, pero los proyectos aprobados lo elevaban a 200 mil, señalándose en forma significativa los siguientes: la construcción de un cuartel general en Pozná, Polonia, el cual estará dotado de todos los avances científicos de que se dispone en la actualidad, en Alemania se instalará una nueva brigada militar, en Italia, un nuevo destacamento, en los países Bajos se desplegarán nuevos equipos de cohetes y en España habrá dos nuevas unidades de combate y en Rumania se ubicará una nueva unidad armada. De esta manera directa se amplía y consolida el proceso que venía en marcha desde la desaparición de la Unión Soviético, el predominio económico, político y militar de los Estados Unidos, en las regiones en las cuales existieron en el pasado los países socialistas del Pacto de Varsovia, del CAME, es decir, se trata de las regiones geográficas del Mar Báltico y de la zona de los Balcanes.

El propósito de estas nuevas instalaciones bélicas, las cuales están en consonancia con los aumentos de los presupuestos aprobados, consiste en que la OTAN pueda y deba reaccionar rápidamente, con agilidad, contundencia, ante nuevas acciones armadas de Rusia, a efecto de impedir que se repita la experiencia de Ucrania. En estas bases estarían incluidas armas o sistemas antiaéreos que tengan la capacidad técnica de responder en forma inmediata, utilizando un tipo de armamentos como los que tiene Rusia en este momento y que se están utilizando en la guerra contra Ucrania, sin esperar a que lleguen a esos territorios dichos equipos procedentes de otras naciones.

La experiencia demostró que, aunque una nación decida entregar ayuda militar a Ucrania, por ejemplo, se requieren por menos dos meses, además de la preparación y capacitación a los soldados de ese país, para manejar estos equipos, lo cual implica una desventaja considerable frente de Rusia, que tiene ubicados muy cerca de su territorio los espacios desde los cuales se pueden organizar las incursiones armadas. Cuenta, además, con el apoyo logístico de Bielorrusia y con la flota del Mar Negro, desde donde se ha lanzado una parte de la ofensiva en contra de la región del Donbás.

Polonia ha salido beneficiada con estas nuevas bases militares, ya que su gobierno está por completo subordinado al gobierno de los Estados unidos, debido a que por su territorio han llegado muchas armas y equipos que provienen de la Unión Americana, ha otorgado refugio a miles de ucranianos que huyen de la guerra, pero también a Alemania que se resistía a incrementar su presupuesto bélico debido a la enorme dependencia que sufre del petróleo y del gas rusos. De esta manera, con estos despliegues de efectivos y de armas, también se están blindando a las repúblicas ubicadas en el Mar Báltico, ya que se consideraban muy vulnerables respecto de posibles incursiones de Putin, sobre todo se está proporcionando una gran protección a Moldavia, cuyo gobierno dice que se siente muy amenazado por el Kremlin.

Pero el nuevo Concepto Estratégico de la OTAN comprende otros aspectos, como son la guerra cibernética, la lucha contra el terrorismo, la consolidación de Europa occidental en la región euroasiática que incluso abarca hasta Irán, el frente ideológico y propagandístico desenmascarando a las organizaciones fundamentalistas en las que se está apoyando el gobierno ruso, y finalmente una presencia creciente en la zona del Norte de África y del Medio Oriente en donde se persiguen varias finalidades: detener el crecimiento económico y político de Rusia, ayudar a Alemania para que diversifique sus suministros de petróleo y gas en esas regiones, incluyendo Arabia Saudita, impedir el desarrollo de la alianza entre China y Rusia y bloquear cualquier posibilidad de que pudieran incorporarse la India y Australia. Finalmente, también se aprobó la incorporación de Finlandia y de Suecia a la alianza militar, con lo que se suman dos destacamentos armados modernos, que disponen de tecnología de punta, rápidos en sus respuestas, que están ubicados precisamente en la frontera occidental de Rusia.