El 5 de marzo de 1953 el Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética y el Consejo de Ministros de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas anunciaron a los pueblos soviéticos y a los trabajadores del mundo la muerte de Iosif Vissarionovich Stalin. Stalin, combatiente comunista en los años de la lucha contra el zarismo, organizador en la construcción del Partido leninista, dirigente en la Revolución Socialista de Octubre, principal dirigente después de la muerte de Lenin en la construcción de socialismo, dirigente en la lucha contra el fascismo y defensor de las posiciones revolucionarias en los debates internos sobre la construcción del socialismo-comunismo.

Desde su juventud Stalin se unió a la lucha revolucionaria integrándose al Partido Obrero Socialdemócrata de Rusia y al bolchevismo encabezado por Lenin. Stalin mostró grandes habilidades para la organización del partido, la intervención y dirección de las masas obreras, organizando manifestaciones y huelgas de los trabajadores en Georgia. Su actividad alertó a la policía política zarista, y desde la clandestinidad Stalin continuó los trabajos de organización del Partido y organización del proletariado.

Activo dirigente revolucionario durante la Revolución de 1905. Los bolcheviques comprendieron la necesidad de fusionar el movimiento obrero con el socialismo científico como elemento determinante en el desarrollo revolucionario. Durante los años entre revoluciones Stalin desarrolló un amplio trabajo organizativo y teórico. Trabajó en el establecimiento de núcleos revolucionarios y en el desarrollo de la prensa del partido, en 1912 participó en la fundación del Pravda, al mismo tiempo Stalin desarrolló y enriqueció la visión del marxismo en lo relativo a la cuestión nacional en su obra clásica El marxismo y la cuestión nacional.

En el transcurso de la Revolución de 1917 Stalin participó como uno de los principales dirigentes, y uno de los organizadores de la insurrección que dio el poder a los soviets de obreros y campesinos. El triunfo de la Gran Revolución Socialista de Octubre llevó al poder a los obreros  y campesinos, que dirigidos por el Partido leninista derrocaron el poder de la burguesía, inaugurando una nueva etapa en la historia de la humanidad. Stalin participó en los trabajos de construcción del nuevo Estado proletario, desde los cargos de responsabilidad militar en la guerra civil y contra la intervención militar de los países capitalistas en coordinación con las fuerzas contrarrevolucionarias, en los cargos de planificación económica y como uno de los principales dirigentes del Partido Comunista de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, apoyó la industrialización y la colectivización del campo, y fue un férreo defensor de la unidad ideológica y política frente a las corrientes oportunistas que se formaron al interior del partido, encabezadas por Bujarin y Trotsky.

El Estado proletario estableció la economía planificada capaz de plantearse la “Producción proporcional para la amplia satisfacción de las necesidades sociales”, en tanto que en el mundo capitalista los trabajadores pagaban los costos de la crisis de sobreproducción y sobreacumulación que se expresaban en hambre, desempleo y represión. En este periodo dentro de la Unión Soviética se desarrolló un proceso que abolió la opresión nacional dentro del estado multinacional proletario.

Al frente del Partido y el Estado proletario Stalin tuvo un papel central en la elaboración de la estrategia de la lucha contra el fascismo. La lucha del pueblo soviético contra el fascismo estableció las condiciones para que los pueblos europeos lograron su liberación y una ola revolucionaria estableciera nuevos Estados en la  República Democrática Alemana, Albania, Bulgaria, Checoslovaquia, Hungría, Rumanía,  Polonia, y  Yugoslavia.

Al final de la guerra las fuerzas revolucionarias lograron establecer una correlación de fuerzas que permitió el triunfo de procesos revolucionarios de carácter socialista en China, Vietnam y Cuba. Así como el impulso en Asia y África de los procesos de liberación y descolonización.

Stalin asumió labores en la planificación para la reconstrucción de la Unión Soviética, devastada por la guerra que segó la vida de más de 20 millones de soviéticos. Por iniciativa del PCUS se colocó como un tema central el debate sobre la construcción de la economía socialista, Stalin tomó parte de este debate en su libro Problemas económicos del socialismo en la URSS, concluyendo que son incompatibles las relaciones mercantiles con la construcción del socialismo. El 5 de marzo de 1953, después de una vida entregada a la lucha contra el capitalismo cesó de latir el corazón de Stalin, pero su legado sigue vivo en las luchas de todos los revolucionarios en el mundo.

En el camino inédito que por vez primera en la historia emprendió la Unión Soviética, rompiendo las cadenas de la explotación del hombre por el hombre, Stalin jugó un papel central, en este camino se cometieron errores, que deben ser estudiados para lograr avanzar los procesos revolucionarios. Sin embargo, estas críticas no pueden partir de las posiciones anticomunistas propagadas por los centros imperialistas, ni por el oportunismo que a partir del XX congreso del PCUS encontró en la crítica a Stalin su punto de articulación.  La plataforma oportunista del XX-XXII Congreso del PCUS a través de la crítica a Stalin en realidad realizaba una crítica a elementos centrales del proceso de construcción socialista e inició la implementación de una serie de reformas que implican tanto el deterioro de la economía planificada, cristalizada en la reforma de Kosygin que otorgaba mayor peso a las unidades productivas frente a la economía planificada, y el abandono de la concepción de dictadura del proletariado, sustituyéndola por la fórmula de “Estado de todo el pueblo” y el cambio de la concepción del partido ya no como vanguardia del proletariado, sino como “partido de todo el pueblo”.

En ocasión del 70 aniversario del fallecimiento del camarada Stalin el Partido Comunista de México le rinde homenaje; reconocemos en Stalin al comunista que entregó toda su vida a la causa revolucionaria, a la construcción del partido leninista capaz de dirigir las lucha por el derrocamiento del capitalismo y la construcción del socialismo-comunismo, nos comprometemos a continuar el estudio de sus obras. En los trabajos políticos y teóricos de Stalin se cifra una serie de discusiones de invaluable valor, y son materiales de estudio necesario en las discusiones contemporáneas sobre la estrategia y la táctica de los comunistas en la lucha por el derrocamiento del capital.

¡Proletarios de todos los países, uníos!

La Sección de ideología del Comité Central del Partido Comunista de México