Por Corresponsal de El Machete

 

Los más de 300 trabajadores y trabajadoras que integran el Sindicato Progresista del Poder Judicial pararon labores la mañana del 28 de noviembre como protesta por el insuficiente aumento del 5% al salario presupuestado para el año fiscal 2024.

El paro inició en los juzgados de la calle 35 en donde la Secretaria General del Sindicato Progresista Luisa Martín denunció que no existe justicia para las y los trabajadores del Poder Judicial ya que no se les asegura la estabilidad laboral y económica. De la misma forma expresó que el Sindicato Progresista mantiene una exigencia del 20% de aumento sobre el salario base, un bono de fin de año y que se garantice que no habrá represalias contra las y los trabajadores que se manifiestan.

Este paro se extendió a más de 20 juzgados del Poder Judicial, entre ello los Juzgados Familiares y Mercantiles en la calle 35, los Juzgados Civiles, los Juzgados Mixtos de los municipios de Tizimín, Valladolid y Ticul y el Juzgado Sexto de Oralidad, entre otros.

De manera simbólica, las y los trabajadores se encadenaron pues, cómo expresó la Secretaria General Luisa Martín, se sienten como esclavos ante las jornadas laborales extenuantes, la excesiva carga laboral y los salarios miserables.

Cabe mencionar que está acción forma parte de una jornada intensa de protestas que el Sindicato Progresista mantiene desde hace más de dos semanas por la defensa de la base trabajadora.