AUNQUE USICAMM CAMBIE, NO CAMBIA NADA
Lev M. Velázquez Barriga
Para entender que el decreto presidencial anunciado desde el 15 de mayo por Claudia Sheinbaum, donde tan sólo modifica los mecanismos para la movilidad de los docentes en las escuelas, es menos que ínfimo y está muy lejos de representar un acto de justicia laboral, es preciso comprender a fondo la racionalidad del neoliberalismo educativo que impera en el Sistema de Carrera para las Maestras y los Maestros (SICAMM), como continuidad del régimen de excepción que separó a los docentes de los derechos constitucionales que rigen a los demás trabajadores del país.
Podemos iniciar diciendo que, parte fundamental de la lógica del SICAMM, es disponer de un bolsa presupuestal insuficiente que habrá de distribuirse de manera desigual entre los maestros, esto se realiza a través de la competitividad individual como falacia del capitalismo para lograr el bien común, con lo cual se sustituye el derecho social al salario para tener una vida que garantice la dignidad humana por supuestas oportunidades de ascenso personal que excluyen a las mayorías y las precarizan, pero mantienen en ellas, como en la zaga distópica brasileña 3%, la ilusión de que el mérito es la vía al alcance de todos para escalar a la cima de los privilegiados.
Continuando el intento de comprender las lógicas instituidas por el capitalismo para la explotación de los maestros como clase social productora de conocimientos, sentidos y habilidades para la rentabilidad, se pueden considerar los siguientes enunciados que buscan analizar en sus partes, las finalidades y racionalidades del SICAMM:
- Naturalizar la competitividad en el principio de las relaciones entre los sujetos, contrario a la distribución de la justicia.
- Destacar el mérito como sentido común, con el propósito de hacer pensar que la progresividad en las mejoras del trabajador son logros personales, no producto de las luchas y conquistas sociales.
- Precarizar el salario de los docentes para desinvertir en la educación a través de los recortes de la nómina. Esto es otra forma de privatización.
- Promover la diferenciación y desigualdad entre los trabajadores que realizan una misma función.
- Instituir sobre el profesorado una pedagogía de la incertidumbre laboral, porque la inestabilidad facilita los mecanismos de control y sometimiento patronales.
- Sustituir la obligación del Estado para garantizar derechos sociales por oportunidades que dependen de los sujetos.
- Desarticular el sindicato como posibilidad de ser un instrumento de organización y defensa de los trabajadores.
- Fragmentar la identidad histórica y colectiva del gremio magisterial, precisamente como agente de transformaciones sociales y de las comunidades.
- Desprofesionalizar y despedagogizar la docencia a través de examinaciones de conocimientos que no recogen la experiencia ni las habilidades pedagógicas.
- Establecer la rendición de cuentas de modelo gerencial, focalizando como responsables a los actores pedagógicos y no a quienes deben ser garantes del derecho a la educación.
- Privatizar los modelos de evaluación del magisterio, desde los diseños de los instrumentos hasta su aplicación y calificación.
- Subrogar la formación continua de los maestros a través de empresas particulares.
En otros momentos, han asociado la carrera magisterial a la criminalización de los docentes, la precariedad de estos con la calidad empresarial de la educación y la sustitución del currículo de los egresados de las normales por el examen de ingreso. He señalado en publicaciones anteriores otras asociaciones; por ejemplo, con las reglamentaciones administrativas para el proceso de reorganización escolar que busca el cierre de las escuelas rurales, los dobles turnos y el impulso a la sobrepoblación de los centros educativos en detrimento de la buena educación; pero, en esta ocasión, dada la coyuntura de otro decreto que se publicó simultáneamente acerca del sistema pensionario, quiero resaltar que ambos son parte de una misma estrategia precarizadora.
Durante la transmisión (jueves 26 de junio) del programa de redes sociales Código Venceremos (alianza de comunicación alternativa entre profesores de CDMX, Chihuahua, Quintana Roo, Zacatecas y Michoacán) voceros de la Red de Defensa Magisterial Chihuahua, quienes son trabajadores de la educación afectados por la privatización de las pensiones, presentaron un interesante punto de análisis que explica la compleja relación que existe entre el SICAMM y la Ley del ISSSTE de 2007; con la cual, se cierra un círculo que completa la precariedad, tanto del salario que se percibe durante la vida laboral como el que se obtiene en retiro.
Por un lado, el sistema de carrera deteriora el salario del magisterio e individualiza la relación laboral, a tal grado que el poder adquisitivo de los profesionales de la docencia se ha deteriorado tanto que, en México se encuentra entre los niveles más bajos con respecto a otras profesiones y también en comparación con la media de los salarios que perciben los profesores en los países miembros de la OCDE.
Por otro, la individualización y privatización de los sistemas de ahorro para la pensión, no sólo precarizan a los trabajadores en retiro porque al final de la vida laboral reciben hasta 60% menos de su último salario después de décadas de que los bancos se han robado el excedente de su trabajo, sino que, también los afecta mientras están activos porque comprometen sus percepciones desde el momento en que el auto ahorro los obliga a depositar otro porcentaje adicional al que automáticamente les descuentan, si es que quieren obtener una pensión mayor a la que son condenados por la voracidad de la banca privada.
En conclusión, el sistema de carrera y las cuentas individuales de la Ley del ISSSTE de 2007, son parte de la misma estrategia para un doble despojo de los salarios de los trabajadores tanto en su vida activa como en su jubilación. De tal manera que, los decretos presidenciales para facilitar los cambios de centro escolar del profesorado o disminuir la edad de jubilación sólo para un porcentaje menor de los que no fueron obligados a las cuentas individuales, son medidas sin trascendencia que mantienen intocables los procesos de despojo laboral de los maestros y de apropiación del producto de su trabajo por parte de la oligarquía bancaria. Aunque USICAMM cambie, no cambia nada si no se abroga del Artículo 3° y no rompe con las lógicas del neoliberalismo educativo.
¡Libertad para el maestro Miguel Ángel Guzmán Michel! Acusado de terrorismos por defender la vida, el territorio y la democratización del SNTE.