El día 21 de mayo se llevaron a cabo las elecciones legislativas en el país heleno, donde los partidos de la burguesía se confrontaban una vez más por alcanzar mayoría para gobernar el Estado capitalista. Por su parte, el Partido Comunista de Grecia (KKE) se presentaba en las boletas con iniciativas y consignas propias de los intereses de la clase trabajadora, con el objetivo de reivindicar la fuerza del proletariado en el parlamento, a la vez que en las calles se expresa el reconocimiento de la clase de su partido de vanguardia.

Desde las elecciones de 2019, donde el KKE obtuvo un 5.30% de los votos (299.621 votos), se ha incrementado su presencia en el parlamento con un aumento del casi 2%, resultando en un 7.23% de los votos (más de 415.000 votos); subió de 15 a 26 escaños. A pesar de que el partido de derecha Nueva Democracia (ND) vuelve a gobernar el país obteniendo 146 escaños (40.79% de los votos), no es suficiente para que gobierne solo, por lo que en julio se convocarán a nuevas elecciones en una segunda vuelta donde se definirá si alcanza mayoría absoluta.

La coalición socialdemócrata de Syriza pierde escaños en estas elecciones: pasó de 86 escaños a 71, tras obtener el 20.07% de los votos, a diferencia del 2019 donde obtuvieron el 31.55% (casi 800 mil votos menos); si bien la derecha ha obtenido más puntos a favor, también es cierto que las fuerzas socialdemócratas se debilitan. Muchas de sus bases prefieren sumarse a las propuestas de los comunistas en el KKE: jóvenes que, tras el trágico accidente de tren en Tempe, cuyas consignas señalaban al actual gobierno y al Estado como el responsable, y recientemente han votado por las listas estudiantiles de la KNE, ven la verdadera solución a los problemas que aquejan a la juventud y a la clase obrera helena; en la zona de Ática es el 3er partido entre los barrios obreros.

Son cada vez más jóvenes, más obreros, mujeres y sectores populares los que reconocen en los comunistas del KKE un verdadero referente para la clase obrera y la verdadera oposición de clase frente a las pugnas interburguesas. Frente al próximo gobierno antiobrero y antipopular, la resistencia comunista y obrera se fortalece.