Por: Ernesto Blanco.

La Revolución Cubana, liderada por el Comandante en Jefe Fidel Castro, constituyó un hito histórico en la lucha por la emancipación de los pueblos y el inicio de la primer construcción socialista en América Latina.

Para comprender el impacto de la Revolución Cubana en la juventud mexicana, debemos analizar la crisis y opresión del sistema capitalista en México. Las desigualdades económicas y sociales, y la represión política son rasgos distintivos de la realidad que vive la clase obrera y los sectores populares en ese entonces y ahora. Además, de la gestión y administración del capitalismo en México, con un control estrecho del Estado por parte del Partido Revolucionario Institucional (PRI), limitaba la participación política y coartaba las libertades individuales y colectivas. En este contexto, la burguesía se beneficiaba del control de los medios de producción, explotando la fuerza de trabajo y obteniendo ganancias desmedidas. La clase obrera, los campesinos y los sectores populares sufrían condiciones precarias, salarios injustos y una falta de acceso a recursos básicos como la educación y la salud médica. Un régimen que ejercía la represión con sus aparatos represivos como el ejército sobre aquellos que se atrevían a alzar la voz y a organizarse, todo lo anterior significó una agudización en la lucha de clases, y del fuerte espíritu de insumisión de la clase obrera y la juventud.

La Revolución Cubana, al cuestionar, enfrentar y derrotar el sistema capitalista en Cuba pasó necesariamente a confrontar al imperialismo, es decir; el capitalismo contemporáneo, ello proporcionó una alternativa concreta para los jóvenes mexicanos que aspiraban a romper con la opresión y la injusticia. La imagen de la Revolución Cubana desafiando al imperialismo y construyendo el socialismo como alternativa al sistema capitalista para los trabajadores del mundo, resonó profundamente en la juventud mexicana, avivando su lucha por la transformación radical de la sociedad y ofreciendo la alternativa hacia la emancipación.

La influencia ideológica de la Revolución Cubana en la juventud mexicana radicó en su capacidad para articular y promover una crítica radical al mundo capitalista que solo ofrece bombas, muerte y crisis sin salida. La lucha por la emancipación de la clase obrera, de las mujeres trabajadores, de los campesinos pobres, los sectores populares, la lucha contra el racismo, contra la ignorancia, contra la guerra mundial, se convirtió en el centro de la conciencia política de la juventud proletaria, inspirándolos a participar activamente en movimientos sociales y políticos, en organizaciones, y entre ellas llevó a los jóvenes a vincularse al Partido y a la Juventud Comunista.

La Revolución Cubana tuvo un impacto significativo en la educación y la formación de la conciencia revolucionaria en el movimiento estudiantil mexicano. Esta influencia se reflejó en la importancia otorgada a la educación como herramienta para la transformación social y la construcción de una conciencia revolucionaria oponiéndose a la educación del capitalismo. Los estudiantes se organizaron en movimientos estudiantiles, sindicatos buscando transformar la educación y que no solo transmitiera conocimientos académicos, sino que también promoviera una conciencia crítica y revolucionaria.

La figura del Comandante Che Guevara, en particular, se convirtió en un símbolo de la rebeldía y la solidaridad internacionalista pero sobre todo del Hombre Nuevo para los estudiantes y jóvenes.

En 1968 con una influencia significativa en el movimiento estudiantil. Los estudiantes se levantaron en protesta contra la represión y persecución política, la desigualdad social del régimen autoritario del PRI. La Revolución Cubana se convirtió en un referente inspirador para los estudiantes mexicanos, quienes encontraron en ella un referente de lucha. Pero que a su vez dio ideales revolucionarios, con principios de solidaridad internacionalista.

La Revolución Cubana promovió la solidaridad internacionalista entre los jóvenes mexicanos. La visión de una lucha común contra el imperialismo despertó la solidaridad y el apoyo hacia el proceso revolucionario en Cuba. Cientos de jóvenes mexicanos y entre ellos los jóvenes comunistas se unieron a brigadas internacionalistas y participaron en actividades de solidaridad para respaldar la construcción del socialismo en la isla.

También la Revolución Cubana influyó en los Jóvenes Comunistas del pasado, presente, y futuro.

Dando entusiasmo, alegría, convicción, valentía, y en todo momento ser Vanguardia.

Bajo el grito de “!Socialismo o muerte!” del Comandante en Jefe Fidel Castro se hizo un llamado a no abandonar las ideas del marxismo-leninismo, a defenderlas y a llevarlas a la práctica aun en los momentos más oscuros como lo fueron los finales de los 80 y principios de los 90.

Las enseñanzas de la Revolución Cubana son vigentes y su influencia es un hecho, aunque algunos pretendan minimizarlas.

Hoy con un gobierno socialdemócrata que pretende ser un rostro humano o asistencialista del capital, pero en esencia es la continuación gobiernos de anteriores; reprimiendo migrantes, la persecución política a los estudiantes, con la precarización de la vida, la constante militarización, la clase obrera, mujeres, campesinos, jóvenes viviendo peores condiciones de vida que las de generaciones anteriores; El mundo entero sumergido en la dinámica imperialista y sus guerras, sus crisis, las confusiones y barbarie que trae para los pueblos, es necesario que la Juventud tome esas enseñanzas de la Revolución Cubana y se ponga en marcha a ser vanguardia, y caminar por nuevas revoluciones Socialistas en México y el mundo.