Pronunciamiento Central Nacional de Estudiantes Democráticos a 57 años del movimiento estudiantil de 1968
Pronunciamiento Central Nacional de Estudiantes Democráticos a 57 años del movimiento estudiantil de 1968
“Ante las necesidad de que las fuerzas progresistas estudiantiles de México se organicen para la defensa de sus reivindicaciones inmediatas, se reunieron en las ciudad de Morelia, Michoacán, 200 delegados, representantes de más de 100 mil estudiantes de todo el país, con el propósito de discutir su participación en la lucha revolucionaria con base en la unidad, democracia e independencia de las organizaciones estudiantiles. La Central Nacional de Estudiantes Democráticos tiene lugar precisamente aquí, en donde la campaña para abatir la enseñanza científica y la tendencia democrática de los centros de cultura superior, ha pugnado por imponer un tipo de educación confesional, golpeando todo principio de legalidad constitucional y culminando en forma antidemocrática con el asesinato del compañero Manuel Oropeza García.”
Con estas palabras, el 17 de mayo de 1963, se introduce la Declaración de Morelia donde se constituye la Central Nacional de Estudiantes Democráticos, al leer detenidamente dicho documento, nos encontramos con planteamientos plenamente vigentes, la solidaridad internacional en esos momentos hacia la revolución cubana que sufría la invasión a la bahía de Cochinos en Playa Girón, misma solidaridad que hoy externamos con el pueblo de Palestina victima de genocidio en la Franja de Gaza por parte del Estado de Israel, nos seguimos solidarizando por las agresiones imperialistas contra la revolución cubana.
Así como en 1963 los estudiantes hacían el recuento de las luchas obreras, campesinas y populares que eran víctimas de la represión del Estado, hacían también un recuento de las propias luchas como la del IPN en el 56 reprimida por el ejército, hoy, podemos señalar las luchas recientes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación ignoradas por el actual gobierno, las luchas de las comunidades en defensa de sus territorios contra los megaproyectos, la represión ejercida contra estudiantes en todo el país, contando expulsiones y procesos judiciales por hacer pintas, por manifestarse, por luchar por una educación pública y gratuita, seguimos denunciando la represión contra el normalismo rural tal como lo hacían en 1963, de igual forma como hoy en el Estado de México y en Nuevo León se lucha contra el aumento a las tarifas del transporte, la misma lucha se señalaba en la primera declaración de Morelia, la misma caracterización que hacen de la política educativa la podemos hacer de la política que hoy se propone desmantelar la educación pública.
Se denuncian tanto ayer como hoy, las leyes orgánicas autoritarias, la falta de democracia, y al igual que en 1963, se señala la necesidad para los estudiantes de contar con “un instrumento de lucha independiente, que garantice la defensa de sus derechos y la consecución de sus objetivos; necesitan de un organismo propio que encuentre en su independencia frente al gobierno la premisa básica de su existencia.”
La experiencia de la CNED se enfrentó a la represión, durante los 60 logró mantener un trabajo que se termina fundiendo en el movimiento de 1968, muchos de los dirigentes de la CNED fueron dirigentes del Consejo Nacional de Huelga, entre ellos, Raúl Álvarez Garín y Arturo Martínez Nateras, fue la represión del 02 de octubre y la que seguiría en años siguientes la que impedirá que se mantenga la posibilidad de construir una organización amplia y representativa, basada en la democracia interna como se propuso la CNED, esa tarea, es la que nos proponemos hoy continuar.
La experiencia tanto en los 60 como ahora demuestra que cuando no hemos estado unidos, las fuerzas del enemigo nos han derrotado, es por ello, que hacemos el llamado, la invitación, el exhorto a que los estudiantes de este país nos unamos, que logremos superar esa dispersión y división promovida por el enemigo, construir la unidad que necesitamos de manera organizada, democrática representativa y permanente.
La CNED, desde Chihuahua a Yucatán, de Ciudad Juárez a Mérida, desde 2023 que se reconstituye ha buscado articular y coordinar acciones que hoy en esta jornada nacional de lucha muestra que es posible avanzar en el camino de unidad que se propone, la Jornada Nacional de Lucha este 02 de octubre suma actividades en el norte del país, Chihuahua y Sinaloa, el centro en Ciudad de México y Morelos, y en el Sur en Yucatán, esperando sumar para que esa efervescencia del movimiento estudiantil mexicano se haga escuchar y luche por una educación al servicio del pueblo, la propuesta, es avanzar por la vía de la organización y la movilización, respaldar a todo estudiante dispuesto a luchar, a no dar tregua en nuestras luchas y expresar la solidaridad irrenunciable con los pueblos del mundo en la lucha por su liberación, así, como con las luchas de la clase obrera, campesina y los sectores populares.
En el centro del país, actualmente hay un ambiente represivo, en la UNAM, los recientes acontecimientos violentos en el CCH Sur han dado pie a criminalizar a la juventud y propiciar medidas autoritarias y de control que en lugar de atender el problema de la violencia y la destrucción del tejido social promovida por el rector Leonardo Lomelí Vanegas, lo que hacen es imponer un clima de miedo para incrementar las medidas punitivas y disciplinar a las comunidades mermando la de por sí poca libertad que contamos para expresarse, manifestarse y organizarse. En todo el Valle de México las expresiones de descontento han sido víctimas de la represión, la persecución, la difamación, la censura, dejando ver que es una mentira que con este gobierno se nos garantizan nuestras libertades democráticas, recientemente, la lucha por los comedores, por mejores condiciones de estudio, becas, contra el aumento a las tarifas, muestra que el descontento está presente y la movilización también que no solo se enfrenta a estos problemas cotidianos, también se enfrenta a este contexto represivo contra porros y organizaciones charras. Es por ello, que exigimos a las autoridades de la UNAM, del IPN, de la UAM y de las instituciones del Valle de México el cumplimiento de los pliegos petitorios entregados por los estudiantes, así como un cese a la política represiva, llamamos a los estudiantes a no esperar nada de las autoridades más lo que puedan ganar a partir de la organización y la movilización. Necesitamos mantenernos firmes, unidos y organizados.
¡Viva la reforma educativa popular!
¡Viva la unidad de los estudiantes con su pueblo!
¡Viva la democracia e independencia estudiantil!
¡Viva la unidad combativa y revolucionaria del estudiantado