Con el campesinado del trigo, por una alianza social anticapitalista
Comunicado del Comité Regional del PCM en Baja California
Respaldamos la exigencia del campesinado en Baja California por precios justos para su producción y, en particular, para la tonelada de trigo; rechazamos el operativo contra estos pequeños y medianos productores, en el Centro de Gobierno de la capital, por parte de una horda de la Fuerza Estatal de Seguridad Ciudadana, que delata el talante represivo del actual gobierno de Marina del Pilar; y subrayamos: los otros partidos del poder político burgués (PAN, etc.) también son lobos con piel de oveja, pues por su conducto se ha forjado la desgracia del campo mexicano, y no han cambiado ni cambiarán.
Los agresores del campesinado pobre y medio –como de la clase trabajadora abrumada por la explotación, el alto precio de la vida y la incertidumbre en la sociedad capitalista– son los mismos: los monopolios y la oligarquía financiera. En el caso particular de los trigueros, La Moderna pretende ampliar sus ganancias reduciendo el costo que paga a los productores, al tiempo que tiene también importante participación a su favor en la venta de semilla, agroquímicos, así como en los créditos y/o el financiamiento. En realidad, La Moderna –que desde hace diez años domina al menos el 50% del mercado nacional, goza de presencia internacional y su marca está entre las 10 más preferidas en América Latina– tiene capital para pagar una cantidad superior a los ocho mil pesos por tonelada, pero se opone por su persecución de altas tasas de ganancia; no hay duda, los monopolios son enemigos del campesinado pequeño y medio. El poder económico y político de los monopolios es no solo intocable, sino aún más fuerte que tiempo atrás. Antes, representado en primer lugar por PRI, PAN, PRD, hoy por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador y su coalición.
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La “Cuarta Transformación” (Morena-PT-PVEM), cuya demagogia busca desactivar y envilecer de una manera u otra la lucha obrera-popular, no ha cambiado nada esencial en favor del pueblo trabajador, y sin embargo ¡todo debe cambiar! Los gobiernos de la 4T han ahondado el abandono del campo, negando subsidios y precios de garantía contrarios al encarecimiento actual del producto primario; y cuyos “apoyos” son burdas migajas, engaños electorales y auxilio indirecto a los grandes capitales. Como representante político de los monopolios capitalistas, el gobierno de Obrador gestionó y firmó el T-MEC –acuerdo que respaldan PAN, PRI, PRD, MC, etc.– para proseguir la senda retrograda de las modificaciones al artículo 27, profundizar la ruina y el despojo al campesinado y encumbrar todavía más a los monopolios de los tres países de Norteamérica.
¡Alto al abandono del campo! ¡No más ataques a los pequeños y medianos productores agrícolas! ¡No más tolerancia ni sacrificio del campesinado frente al Poder burgués! El poder político de la burguesía, con todos sus gestores partidarios, no puede ni podrá garantizar siquiera la producción agrícola ni la imprescindible labor del campesinado, por tanto ese Estado es reaccionario e innecesario, no tiene para el pueblo trabajador ninguna razón para existir y es claro que debe ser puesto de lado y sustituido por otro poder.
Es decir, el Poder Obrero, en alianza con todos los sectores populares. Que construya de manera radicalmente nueva una sociedad libre de parásitos; garantice a la clase obrera y los trabajadores la satisfacción de sus necesidades contemporáneas; represente la alianza mutuamente benéfica entre el campesinado y todos los trabajadores; ponga fin a la afrenta de décadas contra el campo; y persiga una sociedad que, a través de la cooperación, sea digna de las y los mejores hombres y mujeres del mundo rural.
Comité Regional del Partido Comunista de México (PCM) en Baja California.