La violencia en la Península de Yucatán, un efecto del desarrollo capitalista
Por: Guillermo Uc
A pesar de la apariencia que se proyecta en el resto del país, acerca de que la Península de Yucatán es una región con un índice de violencia menor al de otros estados, lo cierto es que, a la luz de los hechos en los últimos años se ha producido un incremento en los delitos violentos en el sureste del país. Si bien es más conocida la incidencia delictiva en estados como Quintana Roo, recientemente se ha dado un repunte de la violencia en los estados de Yucatán y Campeche.
La raíz de esto no se halla en explicaciones superficiales, como que ese aumento en la violencia es producto de la llegada de nuevos habitantes provenientes del resto del país, en abstracto. Ahora bien, es innegable que una de las causantes de esa creciente ola de violencia es un fenómeno nuevo, resultado de un proceso capitalista que en décadas anteriores se encontraba en proceso de gestación: el fenómeno del narcotráfico.
El narcotráfico se rige como cualquier otra industria bajo la dinámica capitalista en su fase imperialista. Va expandiéndose a aquellos territorios hacia donde todavía no tiene presencia con el fin de hacerse con un mercado nuevo. La diferencia más significativa con otras industrias capitalistas es que el narcotráfico opera fuera de la ley burguesa, de ahí que una de sus consecuencias sea dejar una estela de muerte y violencia donde se asienta. Dicha violencia se agudiza más al tener ramificaciones hacia otros negocios criminales, como la venta de armas, la prostitución, la trata, etc.
Algunas fuentes indican que en los 3 estados de la Península existe presencia de múltiples cárteles del narcotráfico del país, por ejemplo, en Yucatán operan el Cártel del Golfo, el Cártel de Sinaloa, el Cártel de los Caballeros Templarios, el Cártel Independiente de Acapulco, etc.; en Campeche se encuentra el Cártel de Sinaloa, el Cártel Pura Gente Nueva y el Cártel de la Familia Valencia Salgado; por último, en Quintana Roo hay células del Cártel de Sinaloa y el Cártel de Caborca.[1] Sin embargo, otras fuentes ubicarían también la presencia de algunos de los cárteles más violentos de México en la Península, como el Cártel del Golfo, el Cártel de Jalisco Nueva Generación, así como otros grupos regionales.[2]
Desde mediados de la década de los 2000, cuando los enfrentamientos violentos entre los distintos cárteles asolaban otros estados del país, en la Península, específicamente en Yucatán, se consideró que esta región del país era una especie de “zona de tolerancia” entre los cárteles, una región prohibida para desatar enfrentamientos. Sin embargo, el auge del turismo en distintos puntos de la Península y, por consiguiente, la apertura de un nuevo mercado para la venta y distribución de drogas alteró esa dinámica, dando como consecuencia el enfrentamiento entre grupos de la industria capitalista del crimen para hacerse con dicho mercado.
Los efectos no podrían ser otros. Desde la aparición, en 2008, de 12 cuerpos decapitados en Yucatán[3], algo que jamás se había visto hasta entonces en dicho estado, inicia un paulatino pero alarmante incremento de la violencia producto del narcotráfico.
Por citar unos ejemplos recientes, en junio de 2022 se hallaron 8 cadáveres en la carretera Chikindzonot – Chan Chichimilá, Yucatán[4]; en los primeros 20 días del mismo año, 5 personas fueron asesinadas en distintos puntos de Campeche, como Escárcega y Champotón, así como también se llevaron a cabo múltiples ejecuciones en Candelaria, Campeche[5]; el caso de Quintana Roo es mucho más desolador, ahí los parámetros se mueven en otros niveles, pues la propia Fiscalía General del Estado indicó que entre octubre de 2022 y febrero de 2023 se ha reportado un promedio de 54 asesinatos al mes[6].
Salvo el caso de Quintana Roo, se podrá argumentar que en Yucatán y Campeche los hechos de violencia relacionados con el narcotráfico son casos aislados y que no es una generalidad. No obstante, según estudios, los homicidios en Yucatán aumentaron un 36% en el primer trimestre de 2021[7], mientras que en Campeche, los delitos violentos relacionados con el crimen organizado aumentaron un 261% en el año 2022[8].
Ahora bien, la violencia por la existencia, presencia y operatividad de estos cárteles de la industria capitalista del crimen en la Península no se expresa únicamente en el asesinato entre sicarios de las diferentes bandas. La clase obrera y los sectores populares resiente también la violencia de estos grupos como ataques directos a través de actividades como el cobro de derecho de piso a pequeños comerciantes, el robo a transportistas de carga, la extorsión, el secuestro de jóvenes proletarias para la esclavitud sexual, etc., sin mencionar, desde luego, las víctimas del fuego cruzado entre los enfrentamientos.
La tendencia indica que este aumento de la violencia no se va a revertir, sino todo lo contrario. Esto tiene una explicación material: hay un aumento constante en el número de consumidores de narcóticos. Según el Centro de Integración Juvenil, en Yucatán se produjo un aumento del 10% en el consumo de drogas en el 2022 con respecto al año anterior, en algunos de los casos, entre niños y adolescentes[9]; en el mismo periodo, en Cancún, Quintana Roo, los casos de consumo de marihuana atendidos por el Instituto Municipal Contra las Adicciones disminuyeron, pero se duplicaron los casos de consumo de cristal atendidos[10] (lo cual es una muestra de que la marihuana es una droga puente hacia drogas más fuertes); por su parte, en 2019, el Secretario de Salud de Campeche aseguró que se reportó un aumento de 11.2% de jóvenes que consumen drogas en la entidad[11] y, aunque no hay datos exactos, el Instituto de la Juventud de Campeche aseguró que en 2021 ese porcentaje aumentó a raíz de la pandemia[12].
Un aumento en la demanda del producto supone un aumento de la actividad delictiva necesaria para su producción y distribución y, por ende, mayores índices de violencia. Ahora bien, ¿cuáles son los factores que propician este aumento de consumidores de drogas en la Península de Yucatán? Los factores sociales e ideológicos con los que la burguesía juega son muchos[13], pero éstos son siempre reflejo de las condiciones materiales.
Como mencionamos más arriba, desde hace un par de décadas, el turismo ha sido una industria en crecimiento en la Península. Inherentemente, el narcotráfico va ligado al turismo, pues éste último aumenta la demanda de drogas ahí donde se desarrolle. El Tren Maya va a terminar de detonar la industria turística en la región, lo que supondría que los altos índices de violencia por narcotráfico que ya se producen en ciudades como Cancún, van a repetirse en otras ciudades de Campeche y Yucatán.
Pero el Tren Maya no solo es un proyecto turístico, sino que implica todo un proceso de acumulación capitalista nunca antes vista en la Península de Yucatán. Otra consecuencia directa de ello es una mayor desvalorización de la fuerza de trabajo y precarización laboral, lo que implicaría mayores jornadas laborales que, en determinados casos, significan que, para que el cuerpo humano soporte tales condiciones, sea necesario recurrir al consumo de ciertas drogas.
Esta tendencia no cambiará porque gobierne uno u otro partido burgués. Desde hace más de una década, en los 3 estados se han alternado gobiernos tanto del PRI-PAN como de Morena y todos han sido señalados de tener vínculos con cárteles de la droga.
De ahí que la lucha por la erradicación de la industria capitalista del crimen que causa muerte y terror entre la clase obrera y los sectores populares no se solucionará en los marcos de la democracia burguesa. Esta lucha debe eslabonarse con la lucha por el derrocamiento del capitalismo y por el socialismo-comunismo.
[1] https://www.yucatan.com.mx/mexico/2022/10/13/guacamaya-leaks-estos-son-los-grupos-delictivos-que-se-disputan-la-peninsula-de-yucatan-353875.html
[2] https://www.poresto.net/yucatan/2022/2/28/estos-son-los-carteles-de-la-droga-que-operan-en-yucatan-318555.html
[3] https://www.jornada.com.mx/2008/08/29/index.php?section=politica&article=003n1pol
[4] https://www.yucatan.com.mx/yucatan/2022/6/26/en-chikindzonot-yucatan-hallan-ocho-cuerpos-con-sello-de-grupo-organizado-329090.html
[5] https://www.poresto.net/poresto-policiaca/campeche/2022/2/28/homicidios-en-campeche-ligados-grupos-delictivos-el-narcotrafico-318522.html
[6] https://www.nacion321.com/seguridad/radiografia-extorsiones-y-violencia-asechan-a-quintana-roo
[7] https://yucatan.quadratin.com.mx/municipios/yucatan-sube-en-semaforo-delictivo-por-narco-ejecuciones/
[8] https://tribunacampeche.com/local/2023/05/24/deterioro-la-paz-el-gobierno-de-layda/#:~:text=En%202022%20la%20tasa%20de,146%20por%20ciento%20la%20extorsi%C3%B3n.
[9] https://www.poresto.net/yucatan/2023/1/5/en-2022-aumento-un-10-el-problema-de-drogadiccion-en-yucatan-cij-366045.html
[10] https://sipse.com/novedades/preocupa-aumento-consumo-drogas-duras-cancun-imca-443461.html
[11] https://www.lajornadamaya.mx/campeche/122742/se-duplico-consumo-de-drogas-entre-poblacion-joven-de-campeche
[12] https://tribunacampeche.com/local/2021/06/06/mas-de-17-mil-jovenes-consumen-drogas/
[13] El Frente de la Juventud Comunista, tanto en su II como en su III Congreso, ha explicado a través de sus Tesis y Resoluciones la prevalencia de esos factores sociales, entre ellos el fenómeno de la llamada narcocultura y las corrientes pequeñoburguesas y liberales de moda entorno al consumo de drogas, que permean en la consciencia de la juventud proletaria.